15 junio 2015

En la frontera.

Hay una calle atrás de mi universidad conocida como "la frontera", donde solemos ir a emborracharnos. Si tuviera que describir mi vida universitaria lo haría con este lugar, con la casa negra. He conocido personas, he roto relaciones y he creado nuevas. Hay muchas historias. Es especial porque aquí comenzó mi descenso. Durante años fue una chica modelo, las personas adulaban mi inteligencia y talento, solían preguntar como lograba equilibrar mi vida. Los chicos se enamoraban de mis ideas, de mi arte, de mis lugares, de mi esencia. Hoy estoy tan hundida que me he dado cuenta que el único lugar al que puedo ir es a las estrellas. Se que he desaparecido por muchos meses, incluso muchos antes de que mi caída comenzara y que será difícil explicar como llegue aquí, pero esta noche necesito contar lo que no le he contado a nadie, lo que solo saben las personas que estuvieron ahí. Ja, soy una dramatica, en realidad sólo es un resumen de mi desmadre amoroso y mis pedas.

A principio de año recursé mi tercer trimestre, prácticamente era empezar de nuevo, la única persona conocida en mis clases era Fabían que había perdido dos trimestres por olvidar pagar su colegiatura. Y Cindy, una chica que conocía de la secundaria y había encontrado en una clase el trimestre pasado. Un día olvide mi celular en un salón y un chico llamado Angel me lo devolvió, a partir de ahí nos hicimos amigos. Él tenía un interés especial en mi. Uno de tantos viernes nos invitó a la frontera, habían pasado muchos meses desde que había estado ahí. Fuimos a la casa negra, pedimos unas cervezas, el lugar estaba lleno, fui al baño y me reuní con ellos al salir, voltee a mi derecha y ahí estaba él. Un chico que tomaba clases con nosotros, lo había visto unos días antes a él y a su tatuaje mal hecho. Me gustaba, no sabía por qué, pero realmente me gustaba. Nos sentamos con él y ¿su chica?. Jugamos unas rondas de Yo nunca nunca, porque a los jóvenes nos gusta revelar nuestras intimidades entre extraños, música tan alta que pierde el sentido y cerveza. En algún punto alguien dijo que debería besar a Ángel.

- Besaría a cualquiera antes que besarte a ti.

Salimos por un cigarro, no estaba tan bien como yo aseguraba.

- Jo, creo que ya estoy flemas... flamas.

Caminamos a la parada del autobús, por algún motivo quede al lado del chico nuevo, platicábamos de música y la cerveza, mi buena compañera me libero de mi timidez,

- Me gustas, me gusta tu tatuaje.
- Pues tú me gustas a mi,

Caminamos, nos gustaba lo mismo, Pink Floyd, Tame Impala, Temples y más. Me tomo lo mano.

Su nombre, por vergüenza lo dejaré en J.

Pasarón los días, conocí a Dichi, Drako, Daniel y Giovanni, Saliamos, bebiamos. Comencé una especie de relación con J. Estaba bien, todo iba bien otra vez.

Un viernes decidimos ir a Regina, una calle del centro de la Ciudad de México conocida por sus bares, bebimos un buen rato. Bese a un par de chicas, a cambio de que un par de chicos se besaran. Salí por un cigarro y una de las chicas me dijo que J estaba tratando de ligarsela. Me molesto un poco, no sé porque. No era mi chico, sólo nos besamos y pasábamos tiempo juntos y... me gustaba. Fuimos al baño. Ella dijo que quería besarlo y a Daniel. A Cindy Le gustaba Daniel,

- Date. Esa fue mi respuesta, aun no sé como accedí a besar a Dichi. Lo hice, Y al voltear J besaba a esta chica, no sentí nada, pero tampoco era un espectáculo del que deseara disfrutar, fui por un cigarro y uno de mis amigos salio atrás de mi. Me pregunto sí estaba bien y le dije que sí, entro al bar y salio la chica.

- Disculpa, no te molestes, yo realmente no sentí nada cuando lo besé, quería separarme pero el no me dejaba.
- Realmente no pasa nada, tranquila.

Cuando regrese todos tenían un desmadre, mi amigo me decía que ya nos fuéramos, yo no quería estaba borracha. Todos creían que estaba enojada... Aún despues de casí seis meses lo siguen creyendo. Caminamos al metro y Cindy corrio a mi.

- J te quiere, te quiere bien. Habla con él.
- No quiero.

Fue nuestra primera pelea *el publico suspira*. Ese día bebí como no había bebido en años, fui a varios bares y antros con un amigo, y termine en un depa. Mi ultimo recuerdo es al rededor de las 5am vomitando y pidiendo disculpas por no "aguantar el pedo" y los chicos diciendo que no fuera tonta... era la unica chica que había sobrevivido hasta ese momento. Después de eso desperté en un auto. Fui a trabajar,

Mis viernes a partir de ahí se volvieron lo mismo, ir a beber, ir a trabajar, a veces no iba a trabajar.

Uno de tantos fines de semana, después de presentar un examen final fuimos a casa de Dichi, juré que solo iba por una cerveza. Ese día conocí los Champions, una combinación de Tonayan, Refresco y Tang. Morí como nunca en la vida, J durmió junto a mi en un sillón. Ese día perdí mi trabajo. Pero ese día también le di un poquito de mi corazón a J.

- Te quiero... poquito.

Esos meses fueron lo mejor a pesar de todo, salia, concía gente, empezaba a sentir algo bonito por J.

Salimos de vacaciones,

El ultimo día que vi a J como "mi chico" fue en la universidad, sólo estábamos él y yo.

- Después de hoy ya no te voy a ver.
- ¿Porqué dices eso?
. Lo presiento
- Yo también.

Nos unimos, Fue el ultimo día para nosotros. O no,,,

Durante las vacaciones seguimos charlando, no podía quedar con él porque tenía que cuidar a mi abuela. Un viernes muy borracho me envió un mensaje de voz. Diciendo que me quería. Y fui feliz, parecía que había encontrado mi equilibrio,

En algun punto el le dijo a una amiga que no quería una novia, y yo lo sabía pero dolió, Y decidí que debía dejarlo como una amistad. No lo logré, seguian las llamadas en la madrugada, seguía gustandome, seguía queriendolo,

Un fin de semana antes de volver a clases, fue cuando comencé a caer. Había conocido meses atrás a un chico en Tinder, y quede de verlo el jueves 30 de abril. No quería verlo aquí que decidí no ir por cosas del destino termine en la noche en el centro y le llame, él seguía ahí, fuimos por unas cervezas y después le llame a mi tío para que fuera por mi, no podía quedarme a dormir con él, al otro día quede con él de nuevo, bebimos desde temprano, no había comido nada, aun me pregunto como logre sobrevivir ese día, Le avisé a una miga donde estaba, y a mi madre que llegaría tarde, en algún punto termine en su casa con sus amigos. Envíe mi ubicación para que mi mamá supiera donde estaba, dormi ahí,

Desperté con una llamada de J.

- ¿Como estas?
-Bien.- Sólo pensaba en donde chingados había dejado mis jeans
- ¿Con quien estas?
Bajaba las escaleras mientras llevaba puesta una camisa de un extraño. - No lo sé.
- ¿Donde estas?
Moví a un chico -¿Donde estoy?
- Por Texcoco.
-No sé
-No mames, Oma, todo el puto mundo te esta buscando. Luego hablamos estoy manejando.
-Espera...

Y colgó. Lo llame mil veces y no contesto. Llame a Cindy

-¿Bueno?
- ¿Qué pedo? ¿Donde estas? Tu mamá te esta buscando. Hasta mi mamá esta preocupada
- Por Texcoco, le envie un mensaje anoche. No sé que pedo.
- Habla con ella y luego hablamos.

Colgo.

Llame a mi mamá. Pedí dinero prestado. Llame a un amigo y me fui, Llegue a casa y dormí.

La siguiente semana volví a salir.

Era la fiesta de mi mejor amigo Alex. Lleve a Cindy y Ángel, Bebimos, bebi hasta que no puede más. Besé a todos, pero no quería meterme con nadie. Alex y Roberto me ayudaban a alejar a los hombres que buscaban algo más. En la madrugada no podía caminar bien, busqué a Alex, Roberto estaba con una chica. Mi mente esta en blanco. Subí a la azotea con Alex y Roberto. Vimos el amanecer.

Con el tiempo descubrí lo que había pasado, Al salir del cuarto de Alex un chico me jalo al baño. Nunca me sentí tan sucia, tan tonta, tan enojada, tan triste.

Y volví a salir, Una y otra vez.

Un viernes me emborrache con Dichi y Aza.

Llegue a casa el sábado, me bañe y me fui a la boda de mi tía, bebí, y fui con J a una fiesta. Bebí más, y probé mi primer cuadro, estaba contrariada, no podía dejar de pensar en ese chico que me hacía sentir nauseas, y a la vez me sentí tan bien con todos esos colores, con esa musica, pero quería beber y no recordar lo mal que me sentía. Morí. Desperté el domingo y bebi, Desperte en casa de J. Llegue a casa en la noche. Al día siguiente estaba avergonzada, nunca me había sentido de esa forma, estaba avergonzada porque J me había visto mal, porque era la unica persona que no quería que notara lo mal que estaba.

Conocí a alguien, una chica que estuvo cerca de mi por unos meses... Su nombre es Barbara es novia de mi tío, ella sabía cosas que nadie más sabía de mi, Y ese día note las señales.

Ese día decidí dejar de beber, pero no lo he hecho, solo no me he vuelto a emborrachar.

Hace un par de semanas había decidido que le diría a J que aun le quería, no había encontrado el momento así que me comía mis sentimientos, en esos días él publico algo, le gustaba otra chica, así que no tenía sentido decirle, Le conté a Barbara, me pregunto muchas cosas y me dijo: Dile, no pierdes nada,

El viernes pasado decidí ir por una chela con Cindy, en el camino entramos a J, ella sabía que no tenía el valor de invitarlo, de decirle mis sentimientos, así que ella lo hizo, él se adelanto para alcanzar lugar, llegamos y pedimos una cerveza, él estaba con una amiga, Cindy pensó que era ella la que le gustaba le explique que era su amiga. Salí por un cigarro, y cuando volví Cindy estaba hablando con él. Me senté y seguí platicando y tomando.

-Vamos por un Cigarro. Salí con Cindy. Le había preguntado sobre mi. Le había dicho que le gustaba, que quería una novia... pero no a mi, porque soy un desmadre, porque no soy sincera, porque solo le digo que me gusta cuando bebo. Y ahí... me dí por vencida.

Un par de amigos se pusieron mal, nos invitaron a casa de un chico, pero no queríamos ir y ya no teníamos dinero.

Estábamos en el oxxo cuando el autobus de J paso, se iba,

- Ya no le dije nada.
- ¡J! VEN.

Estaba tan avergonzada. El corazón me latía muy fuerte.

- ¿Qué pasa?
- Me gustas
- Ya sé.
-Bueno eso es todo.

Y hablamos y no estoy segura de que paso. Creo que le gusto, creo que quiere que cambie, porque piensa que cuando me conoció no me valida la vida y ahora sí, pero no cambio por él. Dijo que hablaríamos el lunes, pero nunca hablamos.

Mi vida es como skins, solo espero que nadie muera.

3 comentarios:

  1. Jajajaja mi vida es como skins.
    Después de haber leído tu entrada siento que estoy robando un pedacito de privacidad :( (lo siento).
    Creo que todos tenemos altas y bajas. Y la verdad no quiero opinar sobre la vida de los demás. Así que te deseo suerte con J, pienso que lo volverás a ver.
    Hermoso tu blog :)

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  2. Jajajaja mi vida es como skins.
    Después de haber leído tu entrada siento que estoy robando un pedacito de privacidad :( (lo siento).
    Creo que todos tenemos altas y bajas. Y la verdad no quiero opinar sobre la vida de los demás. Así que te deseo suerte con J, pienso que lo volverás a ver.
    Hermoso tu blog :)

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  3. TE JURO QUE ESTABA PENSANDO EN EFFY MIENTRAS LEÍA
    Me encanta como escribís Dios extrañaba tanto esto.

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